viernes, mayo 28, 2010

El fin de la Seguridad Social y el colapso del sistema productivo

Con la que está cayendo, como si no tuviésemos bastante con la severa merma del consumo que se avecina gracias a los continuados recortes en nuestras flaquísimas nóminas, desde hacía unos días se nos preparaba el cuerpo para estrenar la nueva forma de financiación del Sistema Sanitario Público y Universal, si bien puede que ya se haya echado atrás Salgado al frente de Hacienda.

Una auténtica ventaja social que teníamos los españoles era este sistema que, con sus defectos, era la envidia de gran parte de occidente, pero parece que somos incapaces de auspiciarlo porque no lo merecemos.

Ahora se nos anuncia que nuestra sanidad no podrá ser gratuita para los usuarios porque comporta un gasto tremendo. Resulta que somos demasiado hipocondríacos y hacemos un uso abusivo del sistema. Como vamos al médico un 20% más que la media Europea, nos van a hacer pagar un 20% de la factura de los gastos que infrinjamos a la sanidad pública.

Y todo esto se plantea sin ahondar en las causas de la lamentable salud biológica de nuestros pacientes, ¿para qué?. A nuestros ministros no les pasa por la cabeza que la clave para ahorrar dinero en médicos y medicinas es no enfermar a la gente previamente. No les pasa por la cabeza que a lo mejor si ponemos un poco de cuidado en no auspiciar tanto el tabaco y las drogas nos ahorramos costosísimos tratamientos paliativos de enfermos de cáncer de pulmón. Pero nuestro Gobierno piensa: ¿para qué esa osadía?. Por otra parte y como parte de este plan recaudatorio destinado a compensar una ineficiencia cada vez más absurda resulta que no nos podremos jubilar hasta los 67 años, o quizá hasta los 69 o, si siguen haciendo las mismas cuentas durante los próximos años, ¿por qué no a los 80?. Bien, entonces, una vez más, lo que realmente hay que proteger es la prolongación de la vida activa de la población porque ¿qué sentido tiene mantener de baja por enfermedad a un funcionario desde los 60 años hasta los 80 cuando se jubile?

Un ejemplo de la inviabilidad del sistema fumar-y-curar se basa en las exageradísimas tasas de tabaquismo femenino constatadas durante estas últimas décadas en España. Éstas determinan que a partir de 2020 vamos a tener un grueso importante de la población femenina rondando los 45-50 años de edad, de baja laboral, recibiendo tratamientos contra el cáncer cuyos precios, a ciencia cierta, serán prohibitivos. No se puede recaudar dinero si la gente no está en condiciones de trabajar para ganarlo.

Una de las razones que los estadistas actuales esgrimen para implantar el sistema de copago es el abuso en la solicitud de servicios de algunos que, de esta manera, acabaría. Me parece muy bien, pero una vez más, insisten en pasar por alto las causas. Porque veamos, si las enfermedades ocasionadas por tabaquismo suponen un 30% del gasto sanitario, ¿no es de justicia que las paguen quienes las padecen y que no nos involucren al resto?. Entonces se me ocurre que lo lógico –y justo- sería que al menos ese 20% lo pagasen exclusivamente los fumadores y sus proveedores. El bulo de que ya lo pagan con los impuestos sobre las labores del tabaco no me vale porque está claro que no compensará en la vida ni de lejos el gasto sanitario.

Un poco de cordura señorías, que yo que no fumo y no tengo que por qué cargar con las pérdidas que otros ocasionan.

viernes, mayo 07, 2010

Documento 9626005688-32B

II SIMPOSIUM CHESTER ‘N MANNING’S ASSOCIATES

MARZO DE 2004

MARCO GENERAL DE ACTUACIÓN. FUTURO DEL NEGOCIO A LARGO PLAZO E IMPLANTACIÓN DE MEDIDAS PREVENTIVAS. ASIGNACIÓN INMEDIATA DE TAREAS.

W. Solomon Pritchard

Parece asumido que la satisfacción de la Factura impuesta a nuestras compañías ha de estar supeditada al respeto hacia las políticas sanitarias de prevención prescritas en suelo americano; al menos de todos y cada uno de los estados litigantes. Es por ello que la mayoría de los gobiernos nos ha mostrado su compromiso tácito ofreciéndonos ayuda logística en la apertura de nuevas vías de promoción de nuestros productos en terceros países.

Sin duda el mayor obstáculo que encuentra la viabilidad futura de nuestro negocio radica en la opinión pública, que no nos va a conceder un tiempo ilimitado; además, el sistema judicial americano también va a continuar siendo una losa sobre la que no pararán de posarse casos Engle. Por eso es por lo que estamos aquí, para asegurar un plazo mínimo de pervivencia del negocio dentro de unos parámetros legales semejantes a los actuales. Siendo nuestros acreedores comprensivos con la naturaleza de estas operaciones de compensación, en la reunión de finales de Enero hemos estipulado que la satisfacción de la Factura, cuya cuantía (como es lógico) aún no ha sido cerrada, necesitará de al menos 25 años durante los que a toda costa habrá que mantener una intensa actividad diplomática en todos los frentes que nos permita preservar los mercados exteriores con niveles globales de ventas similares a los del ejercicio pasado.

(...)

Como punto de partida, sirva de aliento el buen trabajo llevado a cabo por L. Burston y su equipo quienes gracias a su intensa actividad informativa han dado a conocer lo contraproducente que resultaría la puesta en práctica de un incremento absoluto en cantidad y dureza de medidas restrictivas del consumo de tabaco en suelo americano. La “teoría del contagio y efecto dominó” ha removido conciencias en entes administrativas de toda la nación, incluso entre congresistas y senadores; hasta el punto de que, siendo conscientes de que las políticas antitabaco americanas son un referente en el viejo continente, a fecha de hoy parecen predispuestos a advertir sobre este extremo cada vez que sea planteado un cambio legislativo incompatible con nuestros intereses, no ya sólo en mercados extranjeros, sino también medidas que puedan afectar indirectamente y a largo plazo a dichos intereses según la teoría mencionada. Para ello, y con el objeto de dotar de oficialidad a la nueva forma de considerar cambios normativos “de riesgo”, el equipo de Burston trabaja en la constitución de un órgano consultor que canalice cualquier propuesta legal potencialmente conflictiva en ese sentido, y sea estudiada en tiempo y forma antes de contar con la aprobación de nuestros socios y lobbistas.

H. K. Davenport

Llevámos desde 1988 destinando fondos en colaboración con las autoridades para la realización de ensayos clínicos en animales y otros estudios sobre patologías relacionadas con un doble objetivo: La evaluación del posible daño a largo plazo en la salud orgánica de la población y el estudio de una nueva formulación de aditivos como eje del ya abandonado “Proyecto para la Protección de la Salud y Defensa del Consumo Seguro”, concebido al principio como muestra del compromiso de velar por la seguridad de nuestros clientes ante las autoridades y en congruencia con nuestra responsabilidad corporativa. Desde 1992 casualmente fuimos comprendiendo la necesidad de ser los primeros interesados en conocer al detalle y de primera mano los efectos que sobre la salud pueden tener a largo plazo, tanto las nuevas formulaciones como el consumo de nuestros productos actualmente a la venta.

La inversión en este campo de investigación que en principio parecería que es más del interés de los sectores civiles críticos con nuestra actividad o de la sanidad pública, alberga un objetivo clave en la defensa mediática de nuestros intereses. El pre-estudio facilitado en exclusiva a nuestra institución “Future facts of Tobacco Concerns” de N. Caruana viene a confirmar la imparable evolución de la conciencia social sobre el problema en occidente, por supuesto siempre en detrimento de nuestros intereses. La conclusión principal habla de la imposibilidad de conseguir un giro de 180º en la opinión pública ante las cada vez más palpables evidencias de daño sanitario que el consumo de nuestros productos puede producir; siendo este el único obstáculo imposible de doblegar. Sin embargo, sí podemos paliar la merma de nuestros ingresos a lo largo del tiempo y así al menos conseguir el objetivo propuesto a 25 años, tal y como ha explicado mi compañero de conferencia. La clave de la que hablo se llama anticipación, y para llevar a cabo con éxito un ejercicio de anticipación se necesita información. Nuestra Institución ha entendido por información la tenencia de datos antes que nadie y que por tanto nadie más tiene. Nosotros siempre hemos de ser los primeros en saber lo que va a pasar. En eso se basa nuestra ventaja, en que nosotros hemos tenido siempre a nuestra disposición información privilegiada con la que encarar nuestro futuro sabiendo que vamos a tomar las decisiones adecuadas en todo momento.

(...)

A. Hugh Davis

A continuación paso a relatar de manera resumida los resultados de los ensayos clínicos llevados a cabo en nuestras granjas-laboratorio. Este programa ya ha sido oficialmente cerrado de forma definitiva tras un periodo de 15 años de ensayos e investigaciones que han concluido el 1 de Enero de este mismo año. Aunque no hemos accedido todavía a un resumen de conclusiones debidamente formalizado por los responsables jefes del proyecto, sí se han extractado las observaciones médicas más reseñables derivadas de la ingente cantidad de datos recopilados, así como la metodología empleada en la realización de los experimentos.

A grande rasgos, los médicos-veterinarios encargados de los estudios han realizado sus ensayos en cuatro grupos de animales: aves, mamíferos de ciclo vital lento, mamíferos de ciclo vital rápido y primates. Llevará tiempo elaborar un catálogo de conclusiones médicas, dado que no todos los resultados clínicos que se detallan en los informes son, en principio, extrapolables a la medicina en humanos, tal y como se me ha explicado, dadas las diferencias entre la patología animal y la humana.

Para el caso de las aves, los experimentos han sido llevados a cabo principalmente en gallinas ponedoras desde las 8 semanas de edad. Para la puesta en práctica de la simulación se usó la intubación endotraquial como medio de inoculación de humo de tabaco. Se manejaron principalmente dos variables típicas de la administración del agente tóxico: tiempo total de exposición y concentración de la dosis. Siempre repartidas las sesiones durante las horas diurnas en intervalos de tiempo no superiores a 20 minutos. El humo de las cámaras de inhalación procedía de la combustión de cigarros de la marca Marlboro y Marlboro Light. Ambas marcas objeto de ensayos por separado.

(...)

Se hizo especial hincapié en el análisis del contenido de los huevos al objeto de determinar en qué medida éstos acababan siendo contaminados. El análisis toxicológico fue realizado mediante espectrografía de gases. De esta manera pudo corroborarse la proporción del aumento de la concentración de tóxicos al tiempo de exposición. Los ejemplares sujetos al experimento aparentemente no llegaron a desarrollar cáncer. Sí se observaron síntomas esperados como bajo peso y desarrollo esquelético deficiente. En varios casos se produjo la muerte súbita de los ejemplares sin que se les hubiese diagnosticado patologías previas y sin que se pudiese determinar una causa concreta de la muerte. Sí pudo ser certificada la reducción de la esperanza de vida en los ejemplares sujetos a los experimentos como resultado de la inhalación continuada de humo de tabaco. En muchos casos los ensayos tuvieron que ser interrumpidos prematuramente debido a la aparición de cuadros patológicos que impedían la continuidad de experimento, algunos de ellos atribuibles a la inhalación continuada del humo. Es el caso de los cuadros bronquíticos manifestados a primera vista por fiebre y secreción de moco, precedidos de una progresiva inflamación de las vías aéreas. Este estado determinaba el final del experimento con el sacrificio del animal y posterior disección.

De interés primordial, y el cual es el motivo principal de la extensión en el tiempo de la mayoría de los ensayos clínicos, son los estudios y experimentos destinados a evaluar el posible daño genético-transgeneracional en la población del consumo de tabaco, considerado por gran parte del mundo científico un agente mutágeno. Cabe destacar el estudio pormenorizado basado en los ensayos llevados a cabo en ratas, expuestas al humo de tabaco mediante intubación de manera similar a la explicada en el caso de las gallinas. Durante 3 años se ha estudiado una colonia inicial de ratas sobre la que se han podido estudiar los efectos del humo de tabaco a lo largo de 12 generaciones.

Paralelamente, en una parte de la colonia de ratas la administración de los agentes tóxicos se realizó mediante la colocación de tiritas en el lomo, sobre el que previamente se rasuró la zona de contacto. Dichas tiritas fueron sustituídas o reimpregnadas de forma periódica en intervalos de 72 horas. En ellas se extendía una fina capa de nicotina y alquitrán, hasta formar una fina película sobre la cara de contacto.

Los ejemplares sometidos al agente por inhalación desarrollaron en mayor o menor grado afecciones respiratorias tales como irritaciones crónicas de las vías respiratorias, asma, bronquitis, cáncer de pulmón y obstrucciones coronarias, entre otras patologías, según se pudo documentar de las obducciones. En casi todos los casos, las afecciones se hicieron patentes a partir de la mitad del ciclo vital, siendo el cáncer la afección de aparición más tardía (mitad-final del ciclo).

En la colonia expuesta al agente tóxico vía transdérmica mediante tiritas y parches como hemos detallado, no se observaron casos de afecciones respiratorias o al menos la incidencia no era relevante a la hora de atribuir causas. Sí se pudo verificar mediante examen médico la actuación del tóxico en el organismo en base a la sintomatología esperada: inhibición del apetito, presión sanguínea alta y ritmo cardiaco acelerado. En cuanto a la incidencia del cáncer, sí se pudo constatar la aparición de tumores en la zona de contacto o proximidades. También en algunos casos se ha documentado la formación de tumores en órganos internos del paquete intestinal, en glándulas tiroides y vejiga urinaria.(...)

La biometría en los miembros de las sucesivas camadas evidenciaba la disminución del tamaño general de la descendencia. La concentración del agente en el fluido placentario a dosis detectables parece explicar la disminución progresiva, al menos durante 5 generaciones, del tamaño de los especimenes en el momento del parto, efecto que persiste en la etapa adulta (reducción en torno a un 15%). (...) Centrándonos en el análisis de malformaciones congénitas han podido documentarse las siguientes anomalías con posible causa en la presencia del agente en el organismo:

-Extremidades visiblemente acortadas tomando como referencia las proporciones medias para la especie (entre un 2 y un 5%).
-Microcefalia (perímetro craneal reducido en un 5%)
-Alteraciones articulares (falanges torcidas)
-Distrofia muscular (2 casos entre un muestreo de 380)
-Ligero encorvamiento lumbar durante el desarrollo propio de la escoliosis.
-Debilidad capilar prematura en las etapas finales del ciclo.
-Dientes y colmillos apiñados, desalineados, torcidos o separados. (...)

Los datos parecen indicar que el agente interfiere en alguna medida, de manera particular, en la síntesis del calcio durante la osteogénesis intrauterina (...)

En cuanto a tamaño y peso, cuando se ha interrumpido la administración de la dosis, ha quedado certificado el paulatino regreso a la media a lo largo de las sucesivas generaciones. (...)

Se han estudiado con especial interés, por la posible relevancia a medio plazo, los ensayos clínicos llevados a cabo en perros, ratas y cobayas para el estudio de las repercusiones del humo de tabaco en el sistema inmunológico; en concreto la relación entre el agente tóxico y la aparición de alergias de las vías respiratorias.

(...)

Básicamente se trataba de averiguar si las alergias adquiridas como resultado de la exposición al tóxico o sus consecuencias llegaban a ser hereditarias. Para ello se establecieron los diagnósticos pertinentes mediante la escarificación. Es decir, se buscaron ejemplares en etapa preadulta no alérgicos a un espectro de alergenos específico. Posteriormente se procedía a la administración del humo de tabaco por via endobraquial mientras se practicaba la inoculación de los alergenos con la esperanza de que el animal acabase desarrollando alergia en algún momento de la exposición previo al cese de su capacidad reproductiva. Las camadas descendientes no fueron expuestas al humo de tabaco en ningún momento de su ciclo vital y los estudios clínicos sobre estos ejemplares se limitaron al diagnóstico alergológico. Los alergenos usados en los experimentos han sido pólenes (de gramíneas fundamentalmente) y ácaros del polvo.

(...)

La escarificación practicada en todos los miembros en etapa adulta de las sucesivas camadas (sólo expuestos a los alergenos más comunes en dosis discretas), revela una incidencia de las alergias claramente por encima de la media; lo que nos lleva a concluir que la tendencia a que se produzcan reacciones alérgicas fue heredada de el primer ejemplar que desarrolló la alergia en cuestión mientras era expuesto simultáneamente a la acción del agente tóxico, el humo de tabaco. Los síntomas de la alergia manifestados en todas las fases del ciclo vital abarcan desde la rinitis leve hasta el asma bronquial agudo. (...)

Las herederas de las Guerras del Opio

Las tabacaleras, herederas de los traficantes del opio, tras pleitear con 26 estados de la Unión Americana llegaron a un acuerdo extrajudicial con éstos para pagar una sanción multimillonaria. Al ser interrogadas sobre cómo iban a pagar tan astronómica suma, respondieron que para ello estaban los consumidores latinos y europeos.

El fundamento de la demanda en los Estados Unidos fue que el tabaquismo era responsable del 40% del valor de la factura sanitaria en los sistemas de salud, sin contar los perjuicios para las familias por cáncer, muerte, ausencias laborales y otros costes asociados...