sábado, junio 02, 2007

Partido de los NO-FUMADORES IV

DÍA 4

PANEL 12

Volviendo a la “toma en serio” por parte de los votantes, me parece que sigue siendo complicado por la falta de concienciación y lo difícil que resulta la divulgación de informes y estudios apropiados. Es una pena porque incluso gran parte de los votantes más escépticos y reacios, se afirmarían en el convencimiento de que el tabaquismo es un problema de primera magnitud, si tan sólo dispusieran de la información pertinente. Como habéis dicho antes, si supiesen lo que sabemos nosotros porque lo hubiesen leído como lo leímos nosotros, las cosas cambiarían bastante. El tabaquismo tiene en la ignorancia su mejor aliada. No lo olvidéis.

Es imprescindible cierta labor de divulgación de contenidos de aspecto técnico, no sólo el destape de los trapos sucios de nuestro enemigo. En un votante bien informado, el problema del tabaquismo rivaliza en importancia con cualquier otro achacable a la gestión política como pueda ser el paro, la lucha antiterrorista o el precio de la vivienda. Por supuesto, hay que convencer a la población de que el problema es, ante todo, político. Ciertos políticos han de ser en general los culpables en primera instancia y sin disculpas. Con valentía y buena voluntad política esta lacra no nos afectaría. Dicho de otra manera, el tabaquismo ha de ser el resultado de la flaqueza moral de personas concretas en el poder o, añadiéndole audacia a la acusación, el producto de la corrupción de políticos con nombres. A estas personas habrá que buscarlas, señalarlas con el dedo y apartarlas del puesto que ocupen. Expresándonos con diplomacia, una acusación así no alarmará a la opinión pública, que en muchos casos creerá que era un secreto a voces. Pues es normal que exista una minoría oportunista que merezca ser perseguida, dados los nocivos efectos para la sociedad, consecuencia de un cuestionable proceder en el desempeño de sus funciones públicas.

PANEL 13

Ahora que lo dices, además, es algo inevitable que suceda algo así. Sólo es cuestión de tiempo. Sucederá algo parecido a lo que ha sucedido durante estos años con el secreto a voces que era la existencia de la corrupción urbanística. Actualmente ya no es secreto y no es ficción. Culpables concretos están siendo procesados. Ahora bien, esto no es posible hoy por hoy hasta que la sociedad no cobre conciencia sobre el problema; hasta que la sociedad no se de cuenta de que los intereses económicos generales no justifican el sacrificio, ni tan siquiera la merma, del bienestar y de la salud pública. Entre otras cosas, porque los intereses tabaqueros ni siquiera eran generales o comunes sino muy particulares. Resumiendo, hasta que no se considere el auspicio por parte de cargos públicos de los intereses tabaqueros como delito o inaceptable socialmente, pasará mucho tiempo.

PANEL 14

Me gustaría hacer hincapié en la necesidad de emplear una estrategia de aislamiento a la hora de tratar a la Industria Tabacalera. Recuerdo un artículo del que fuera alcalde de Madrid, Joaquín Leguina, titulado “Gordos, fumadores y otros proscritos”. Tenemos que dejarle claro al público que nuestro objetivo es sólo uno: acabar con el tabaquismo. Y que no hay ninguna intención ulterior. Han de saber que nuestra “manía” al tabaco no es extrapolable a otras áreas; que después del tabaco, no la vamos a tomar con el sector vinícola; después de los fumadores –contra quienes además no va la cosa- no vamos a perseguir luego a los obesos o a los homosexuales. Nuestro único interés será la lucha antitabaco y no perseguimos a nadie ni nos la damos de misioneros o salvadores.

Volvemos a lo mismo. Tenemos que hacerle saber a la gente lo indiscutible: el tabaco es prescindible para nuestra sociedad. Por otro lado se tiene que llegar al convencimiento de que es algo perjudica a todo el mundo y no beneficia más que a unos pocos que, además, no se van a morir de hambre por muy deprisa que acabemos con el cigarro. Por tanto, todo el mundo ha de sentirse perjudicado por este mal común. Los que no se sientan perjudicados directamente, al menos deberán reconocer su ineficiencia económica y el daño que causa a sus congéneres y a nuestra sociedad en general. Cualquiera que sea propietario de un negocio no directamente relacionado con la Industria Tabaquera, cualquier empresario que emplee o no a fumadores, ha de sentir que la Industria Tabaquera de manera directa o indirecta le endosa a su negocio los gastos que el humo del cigarro ocasiona.


DÍA ANTERIOR, DÍA 1, DÍA 2

No hay comentarios: